La violencia en todas sus formas llevadas al extremo.
-Hace más de un año , Tito Casanova me invitó a dirigir esta obra. Leer el texto fue conmovedor y perturbador. La ficción de la obra encara, de una forma salvaje, aspectos de la condición humana que no son fáciles ni agradables, pero sí reales y cotidianos, Y la esencia de la obra se vive no sólo en México, sino en todo el mundo de formas emocionales, psicológicas y sexuales.
Casanova volcó sus esfuerzos en convocar a un grupo de actores para realizar al proyecto. Con ellos, exploramos el texto a fondo y sugirieron nuevas situaciones y conflictos. El texto fue desarrollándose fiel a la idea de Casanova, pero ahora propiedad de cada personaje, de cada actor. (aseveración textual del director José Acosta).
La irresponsabilidad ante la paternidad, la falta de ética profesional, la deslealtad, el segregarísmo, la impotencia mezcla de miedo y vulnerabilidad, el abuso sexual y psicológico aunados al desamparo, son los temas medulares en que incurre ésta dramaturgia.
Obra teatral perteneciente al género del realismo y naturalismo, en la medida en que proyecta problemáticas existentes sin tapujo alguno, de una sociedad que esconde sus miserias del alma, justificando sus aberrantes acciones y manera de vivir la vida, ante la destrucción deshumana en su entorno.
El abuso sexual a menores es el punto de arranque que va develando poco a poco situaciones adversas sufridas por los huérfanos de una institución corrupta, como suele suceder, y aunque el texto parte de la ficción, recordemos que pese a ser muy cruento, la realidad desgraciadamente siempre supera a la ficción.
Es un juego en el que los participantes son víctimas y victimarios y qué en la pluma del actor y ahora dramaturgo y productor Alberto Casanova (Tito), adquiere matices cruentos, los cuales se muestran de manera implícita dentro del texto, presentando una desenmascarada cuartada que invoca a la denuncia social.
Es una obra de denuncia que además contiene tintes que le hacen incursionar dentro del género teatral psicológico, pues sus personajes van proyectando mediante la emotividad, los móviles que les hicieron destrozar sus almas con una infancia en soledad y abusos constantes, en donde el juego era pagar con sometimiento irracional, incluso sólo por comer.
CARNALES es una obra como a-priori hago saber, original de Alberto Casanova, quien actúa y la produce junto con el Señor Oscar Rubí, que conmueve y consterna al público. Contiene un texto muy bien estructurado que es llevado al escenario de la mano de su director artístico, el Señor José Acosta, quien presentando varios cuadros escénicos que posee el texto, mediante prospecciones y retrospecciones temporales, que Acosta logra con el apoyo del juego de luces y sonidos, aunados al uso de objetos de utilería movibles, los cuales son manipulados rápidamente y a discreción, por los mismos actores.
El cambio de algunas prendas del vestuario efectuadas por los actores, en conjunto proyectan dos épocas distintas que precisa la obra, y que son la de la década de los 40’s cuando mediante las remembranzas del pasado los personajes aparecen en calidad de infantes, y la época de los 90’s del siglo pasado ya siendo adultos en un encuentro programado.
Referentes temporales que se ubican en un internado de menores de edad, y en una cantina, en donde el encuentro como personajes ya un poco maduros, los lleva a recordar y revivir un pasado tumultuoso compartido.
El elenco está formado por el mismo Tito Casanova, quien comparte créditos en el escenario con los actores León Michel, Ricardo Reynaud, Aarón Baldert, Roberto Castañeda y Roberto Ríos,; todos desempeñando un magnífico papel.
La obra teatral CARNALES se presenta todos los jueves en el Teatro Rafael Solana a las 20:30 horas.